Este año las circunstancias hacen que tengamos que vivir la Semana Santa de otra manera. Durante la cuarentena que la mayoría debemos cumplir hemos decidido ayudar al grupo más vulnerable ante el Covid-19 como son nuestros mayores. Con este objetivo vamos a destinar el dinero de adorno de la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno a la residencia de ancianos de San Francisco. De manera que destinen esta aportación a comprar material sanitario, productos farmacéuticos, de higiene, alimentos. En definitiva ayudar a cubrir parte de sus necesidades básicas.
En estos convulsos momentos que nos ha tocado vivir es la mejor manera de vivir nuestra Semana Santa.